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martes, 24 de agosto de 2021

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Un 25 de agosto de 1958 nacía en Burbank, California, uno de los directores más populares, prolíficos y originales de las últimas décadas. Dibujante, director e incluso poeta, Tim Burton es un creador único en la historia del cine. Autor de una selecta filmografía con películas inolvidables que van desde las sensibles Eduardo Manostijeras y Big Fish, pasando por sus peculiares biografías Ed Wood y Big Eyes, además de las taquilleras Batman y Alicia en el País de las Maravillas. Su imaginación desbordante ha logrado crear un mundo onírico de ambientes tenebrosos y personajes extravagantes. Un universo claramente reconocible, consiguiendo que cualquier espectador que vea un par de fotogramas de sus películas pueda saber quién es el director sin tener que mirar los títulos de crédito.

Desde que en 1982 debutó como director con el cortometraje Vincent (de cinco minutos, animado en stop-motion y filmado en blanco y negro), su estilo particular fue bien acogido por la crítica, hasta tal punto que su forma de abordar los temas y la manera en que los representa, su toque estilístico y su arte enigmático y expresivo, han llevado a analistas y escritores a estudiar su obra, a escribir sobre su vida y analizar cada una de sus películas con detenimiento.

La mayoría de las historias de Tim Burton tienen un estilo claramente inspirado en la estética gótica, con toques de terror y comedia negra. Y es que, Burton, desde su más temprana edad, demostró gustos específicos y singulares por los cómics y, sobre todo, por la literatura fantástica y sombría de Edgar Allan Poe, las obras siniestras de Charles Dickens y las antiguas películas de terror y ciencia ficción del momento. Y es así como Tim Burton, creador de mundos fantásticos y un tanto aterradores, lleva más de veinte años deleitándonos con obras extraordinarias. Un universo oscuro, personajes atormentados, escenarios inquietantes, el pequeño mundo de la imaginación de Tim Burton nos lleva a un viaje por los senderos de lo que no es comúnmente aceptado como bello o alegre. El hombre que comenzó su carrera en Disney es ahora reconocido como uno de los maestros de lo fantásticamente extraño. Por lo tanto, os invito a realizar una mirada retrospectiva sobre una carrera poco convencional.


Esta comedia negra de fantasía jugó con los límites del absurdo y sorprendió a todos con su original concepto, gracias al delirante personaje inventado por Burton, que se convirtió en uno de los más icónicos de la década. Michael Keaton encarnó al grosero pero encantador fantasma exorcista de vivos, que entabla amistad con una solitaria y excéntrica joven interpretada por Winona Ryder. La película recaudaría 80 millones de dólares, convirtiéndose en un clásico del cine de Hollywood y acreedora de un premio Óscar por Mejor Maquillaje.


La película fue la primera adaptación al cine de este famoso superhéroe de cómic y tuvo la díficil tarea de superar a la popularísima serie de los 60, que había instalado en el imaginario colectivo a Batman como un personaje colorido y psicodélico, con villanos igual de caricaturescos. La impresión del director fue la elección perfecta para recrear este mundo de fantasía, pero con un tono lúgubre y un estilo visual gótico que quedaría asociado al personaje para siempre. Además Burton volvió a elegir a Michael Keaton para el papel protagonista y a Jack Nicholson en el papel del malvado Joker. Además, contó una vez más con la colaboración de Danny Elfman (el compositor de la música de casi todas sus películas) y se dio el lujo de contratar al diseñador de producción Anton Furst, con quien había querido trabajar desde Beetlejuice. La película funcionó tan bien en taquilla y con la crítica que los estudios Warner le encargaron también su secuela Batman Vuelve (1992), para la que volvió a contar con un elenco de estrellas.

Cada una de sus películas genera un gusto particular, un grupo de seguidores y se vuelve un filme de culto en sí misma. Un claro ejemplo lo es, indudablemente, Edward Scissorhands, la cual se convirtió en una poderosa cinta para Burton, cargada de contenido sensorial y narrativo, que impulsó su carrera como realizador. También fue la primera de una larga lista de colaboraciones con Johnny Depp, quien se transformó en su actor fetiche por excelencia. Le siguieron Ed Wood (1994), Sleepy Hollow (1999), Charlie y la Fábrica de Chocolate (2005), la animada La Novia Cadáver (2005), la adaptación del musical Sweeney Todd (2007), el live action de Alicia en el País de las Maravillas (2010) y la desastrosa Dark Shadows (2012), todas protagonizadas por el actor.

En Eduardo Manostijeras, Burton proyecta dos dimensiones distintas, dos mundos completamente diferentes que interactúan, a través de los protagonistas. Frente al castillo, un lugar sombrío e inquietante, pero a la vez, con un magnetismo atrayente, los suburbios se presentan sin personalidad, aburridos y la gente que los habita se muestra autómata y superficial. Con su cuidada y monótona apariencia, muestra una realidad contrastada y opuesta a la peculiar y estrafalaria que habita Edward, un personaje solitario y excéntrico, clara referencia al cuento de La Bella y la Bestia.

Pesadilla antes de navidad (El extraño mundo de Jack o The Nightmare Before Christmas) es un musical en stop motion que cuenta la historia de Jack Skellington, un hombre calavera que reside en la Ciudad de Halloween. Al tropezar con un portal en el tiempo, se traslada a la Ciudad de Navidad, donde decide celebrar esta fiesta. Unos personajes entrañables, canciones de lo más pegadizas, una trama que te atrapa desde el primer segundo.



Año 1799. El agente Ichabod Crane (Johnny Depp) es enviado por sus superiores a la aldea Sleepy Hollow, un lugar en el estado de Nueva York donde un asesino en serie decapita a sus víctimas. Al llegar allí, los aldeanos le cuentan la leyenda de un caballero sin cabeza que deambula por los alrededores y que es el culpable de los asesinatos. Para resolver el misterio, el agente de policía contará con la ayuda del joven Masbath (Marc Pickering), un niño huérfano que quiere vengar la muerte de su padre.


Después de la inclasificable pero genial Mars Attack! (1996) y la cuestionada remake de El Planeta de los Simios (2001), Burton volvió al drama y al romance con esta celebrada adaptación de la novela de Daniel Wallace. Sin dejar nunca de lado por completo la fantasía, en esta película el elemento sobrenatural hace las veces de alegoría para contar la historia de Ed Bloom, un hijo frustrado en su intento de separar la realidad de la ficción en la biografía de su padre moribundo. Una de sus obras más emotivas que fue protagonizada por Ewan McGregor y resultó excepcional dentro de una filmografía que, a menudo, se repite a sí misma. Otra que, tal vez, cae dentro de esta categoría es la infravalorada Big Eyes (2014), un drama protagonizado por Christoph Waltz y Amy Adams, basado en la vida de la pintora Margaret Keane, una artista que durante décadas luchó por recuperar el crédito de su propia obra y que tuvo una gran influencia en la estética de los personajes de Burton.

Con Charlie y la Fábrica de Chocolate, Burton nuevamente nos traslada a un universo fantástico, de ciudades con casas algo chuecas que se equilibran bajo reglas propias.

La película está basada en el libro del mismo nombre de Roald Dahl que ya tuvo hace años una adaptación al cine. En medio de la ciudad, la Fábrica de Chocolates se alza como si fuera un misterio. Y cuando logramos entrar, el mundo extraño, aunque hermoso, nos deja afuera. Es el mundo del extraño Wonka y de los “umpa lumpas” y sus canciones y bailes, un espacio que permanece tan cerrado en su interior como en su exterior. Sin embargo, Burton logra una fábula efectivamente conmovedora y bella, amable, entrañable. La Fábrica de Chocolate de Wonka es, en manos del director, un colador que desecha a todos aquellos seres con cualidades desagradables: la niña ambiciosa, la malcriada, el que no puede parar de comer, todos son apartados y sólo sobrevive el niño de corazón puro.

Basada en un cuento popular ruso-judío del siglo XIX, la historia sigue a Víctor van Dort, un novio tímido que practica sus votos matrimoniales en presencia inadvertida de una joven fallecida, poniendo sobre su dedo, y a manera de broma, el anillo de compromiso que planea dar a su pareja. Pero lo que no sabe el pobre mortal es que la muerta reclamará sus derechos como "prometida", levantándose de su tumba. En la película, filmada usando la técnica de stop motion, Johnny Depp dio voz a Victor Van Dort, mientras que la voz del cadáver de la novia corresponde a Helena Bonham Carter, quien en la vida real fue esposa de Tim Burton hasta el 2014. El resultado final es una obra dotada de una tremenda sensibilidad, excepcional timing cómico y notable presencia visual.

Basada en el musical de Stephen Sondheim, la acción transcurre en el Londres del siglo XIX, cuando Sweeney Todd, un barbero injustamente encarcelado durante 15 años en el exilio por un juez lascivo, regresa a su hogar con una nueva identidad y jurando vengarse. Pero no encuentra a nadie en su casa: la mujer se ha envenenado y su hija está bajo la tutela del juez que le condenó.

 Sweeney Todd, desencantado de la humanidad, rehace su vida junto a la amoral pastelera Mrs. Lovett y, trabajando de nuevo como barbero, inicia su particular venganza, haciendo uso de una navaja de afeitar para degollar a sus víctimas, a la espera de reencontrarse con el juez. Mientras tanto, Mrs. Lovett prepara, con los cadáveres, unos pastelitos de carne de lo más especial que sirve a los inocentes clientes de su taberna. La historia está basada en una leyenda urbana londinense que describe a un barbero que asesinaba a sus clientes para robarles sus pertenencias. Su socia, Neils Lovett, le ayudaba a eliminar los clientes haciendo pasteles de carne humana que, posteriormente, vendía en su pastelería.

Se cree que la barbería de Sweenet Todd estaba situada en la calle 186 Fleet Street de Londres, junto a la iglesia de St. Dunstan, y que se conectaba a través de un pasaje subterráneo con la tienda de tartas y pasteles de la señora Lovett, ubicada en los alrededores de Bell Yard.


Han pasado trece años desde que Alicia (Mia Wasikowska), una joven independiente y taciturna entró en el País de las Maravillas, una dimensión alucinante dominada por la Reina Roja (Helena Bonham Carter), una monarca déspota y paranoica. Allí se entera de la profecía según la cual ella, Alicia, está destinada a liberar a ese extraño mundo de la tiranía de la reina. Para ello cuenta con la ayuda de varios personajes fantásticos, entre otros, una ratona espadachín, un gato sonriente y un sombrerero loco (Johnny Depp). Una película de fantasía inspirada en los libros Las aventuras de Alicia en el País de las Maravillas y A través del espejo y lo que Alicia encontró allí, ambos de Lewis Carroll.

Tim Burton volvió a sus raíces con este largometraje animado en blanco y negro, basado en su segundo corto (con una duración de 35 minutos) y realizado en 1984. La historia, claramente inspirada por la obra de Mary Shelley, gira en torno a la relación de un niño con su perro bull terrier. En esa época, Burton todavía se encontraba trabajando para Disney y, según cuenta la leyenda, fue despedido por utilizar recursos de la compañía en una película que consideraron demasiado terrorífica para el público infantil. La historia del niño que quiere revivir a su perro arrollado en un accidente no era precisamente el objetivo que buscaban. Pero tuvo su revancha con el largometraje que Burton realizó, en 2012, con la producción de… ¡Walt Disney Pictures!

Big Eyes es una película biográfica dirigida por Tim Burton, escrita por Scott Alexander y Larry Karaszewski y basada en la vida de los artistas estadounidenses Margaret y Walter Keane. Durante años, el pintor Walter Keane ha sido considerado como uno de los artistas más talentosos y con mayor éxito comercial, sobre todo en los años 60. Sus pinturas, que representaban a niños con ojos tristes y anormalmente grandes, se vendieron como rosquillas. Sin embargo, Walter Keane era en realidad un impostor: el pintor, el pobre artista, firmaba con su nombre las pinturas de su mujer Margaret Keane. La joven esposa, que había dado su acuerdo bajo la influencia de su marido, había vivido durante años bajo la sombra de la estafa hasta que la verdad salió la luz, debido a un proceso judicial.


Es innegable el talento y la imaginación desbordante de Burton, pero seguramente su cine no sería el mismo sin sus colaboradores más fieles. Sus actores fetiche tienen gran parte de culpa, sobre todo el polifacético Johnny Depp. Sus últimas películas incluyen la adaptación de la novela El Hogar de Miss Peregrine para niños peculiares (2016) y la versión live action de Dumbo (2019), el clásico de animación de Disney protagonizado por un pequeño elefante con la increíble capacidad de poder volar. Ambas fracasaron tanto en taquilla como con la crítica.













Y, aunque desde hace algunos años, sus películas no han causado el impacto que han logrado especialmente sus primeros trabajos, el futuro de su cine es bastante prometedor con propuestas que llegan este mismo año, aunque un poco lejos de su ambiente cinematográfico, ya que Tim Burton se ha aventurado a adaptar las peculiares aventuras de la Familia Addams, en una serie, la primera de su carrera que será transmitida por Netflix. Más que narrar nuevamente lo cotidiano de la familia más macabra, pero encantadora, de la gran pantalla, Tim Burton ha decidido dar un salto en el tiempo y, sobre todo, concentrarse en Miércoles Addams. La serie seguirá, así, el destino de la joven como estudiante en la misteriosa academia Nevermore.

El universo de Burton es macabro y maravilloso, onírico y caricaturesco, mientras que su imaginación parece la de un niño que se ha cruzado con un genio. Tim Burton es uno de esos artistas que ha creado un mundo propio. Sus películas son viajes psicodélicos, que nos dan la impresión de haber entrado en la cabeza de un loco... Un perfeccionista desmesurado.



Tras 40 años de carrera, el director sigue siendo tan prolífico como siempre y continúa sorprendiéndonos con su extraordinaria imaginación y creatividad. Es uno de los que dejan huella, uno del círculo muy cerrado de visionarios que van contra las convenciones y que marcan nuestro mundo para siempre... Sin duda, Tim Burton, maestro del universo gótico por excelencia, se ha ganado un lugar único en la historia del cine. 

16 comentarios:

  1. ¡Holaaa! Genial post, Maria. Sin duda, Burton es un profesional muy importante para la cultura. He visto algunas de sus películas y me han gustado más, aunque mi favorita será Big Eyes, la historia simplemente fue wow, amé todo.
    Besoss ♥

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    1. Hola Valeria!
      Me alegra que te haya gustado mi post.
      Nos leemos.
      Salu2

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  2. Me gustan mucho la mayorìa de sus pelìculas. Buen post.

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  3. Hola Maria!!
    Amo a este director, me encanta sus peliculas. Gracias por la reseña y recomendación.
    Besos💋💋💋

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    1. Hola Ella!
      Me pasa lo mismo. Es un director de lo más original.
      Besos.

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  4. ¡Hola!

    La verdad es que mi peli fav de Tim Burton es Charlie y la fabrica de chocolates. No sé por qué, pero siempre me reconforta el corazón y me encanta verla siempre que la pasan en la TV.

    ¡Nos leemos!

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    1. Hola Erik!
      Yo no sabría cuál escoger... Me gustan todas!
      Salu2

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  5. Es un genial director, te mando un beso

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  6. por lo visto, y sin querer queriendo, he visto varias películas de tim burton sin darme cuenta (perdona, pero yo soy bien despistado en eso de querer enterarme quien filma las películas): "edward scissorhands", "sleepy hollow", "charlie and the chocolate factory", que me han parecido bastante buenas.

    lo que si quisiera ver de todos es la serie "wednesday" producida por netflix, basada en la hija de la familia addams; que como personaje, y por lo que acabo de leer, le cae a pelo al estilo de este director.

    besos.

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    1. Hola!
      Pues sí y creo que es la más gótica (en todos los sentidos) de la familia Addams.
      Besos

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  7. Una maravilla de blog
    me has encantado Miles de abrazos desde Miami

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    1. Hola!
      Me alegro que te guste. Feliz fin de semana.
      Salu2.

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  8. El universo de Tim Burton siempre me ha llamado la atención. Tiene algo que repele, pero atrae al mismo tiempo. Definitivamente, no hay nadie como él. Hay muchas películas que tengo pendientes, pero creo que la que más ganas tengo de ver ahora es 'Big eyes', así que a ver si la veo muy pronto. Esta entrada me la ha recordado, así que te lo debo :P
    ¡Nos leemos!

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    1. Hola Ana!
      Pues nada, me alegro mucho haberte hecho pensar en ello.
      Salu2 guapa!

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