Un conocido refrán reza: «Dime con quién
andas y te diré quién eres». Pues bien, alguien parafraseó ese dicho
transladándolo al ámbito literario: «Dime lo que lees y te diré quién eres».
Y es que va a resultar que lo que leemos (y lo mismo vale para el cine, la tv, la música, etc) determina en cierto modo
quién somos. La lectura nos trasnforma por donde pasa, a través de los libros
que elegimos y de los autores que nos apasionan. Tal vez todo depende de un
estado de ánimo, de una finalidad cultural o, incluso, de los gustos literarios
de cada un@, porque los hábitos de lectura hacen al monje lector.
Seguramente, todo empezó con las primeras lecturas infantiles, cuando el libro
de « Alicia en el país de la maravillas» nos quedaba demasiado grande para
nuestras diminutas manos... O tal vez comenzara con los cuentos para dormir que
nos contaban de pequeñ@s..., lo que nos lleva a reflexionar sobre el tipo de
lectores que éramos en aquellos años. Curios@s, osad@s,
ansios@s,
tímid@s… Más tarde, llegaría las primeras visitas a las bibliotecas, sorprendid@s
ante la posibilidad de poder tomar prestado el libro elegido libremente bajo
nuestro criterio y devolverlo una vez finalizado, o las horas interminables que
pasábamos en las librerías, deambulando entre sus estanterías repletas de
tantas historias con las que nos identificábamos, porque, en el fondo, éramos
ese autor trasmitiendo sensaciones que eran las nuestras o ese personaje en
otro tiempo y otro espacio. Fuese como fuese, acabábamos sucumbiendo ante la
necesidad de encontrarnos a nosotr@s mism@s,
intentado pulir nuestra personalidad como lectores.
Cualquier persona amante de los libros,
independientemente del estilo, la temática o el soporte, se identifica con lo
que está leyendo en un determinado libro, con sus personajes, con la historia,
con las situaciones y la verosimilitud de lo que lee. La realidad es que los libros nos definen
como lectores y que en cuestión de gustos no hay nada escrito. De hecho, hay
estanterías muy distintas, el mero hecho de su presencia ya dice mucho, pero su
contenido es aún más importante…porque, en el fondo, son una señal de la clase
de lector que somos… Eso sí, no hay que olvidar que existen infinidad de tipos
de lectores, tantos como libros hay. Por eso, lo de que cada persona tiene sus
hábitos, preferencias y formas de leer, hace más difícil encasillar de manera
general al lector en un lugar o en otro. Sí a esto se le suma que cada persona
puede pasar por distintas etapas lectoras a lo largo de su vida, la cosa se
complica aún más, pues habría que hilar muy fino para llegar a identificar
distintos conjuntos de personas según distintas formas de abordar la lectura.
Para todo hay categorías, y los lectores no son la excepción. Por eso, os propongo una serie de clasificaciones, tal vez os identifiquéis con alguna o varias, quién sabe.
EL LECTOR OCASIONAL O DE BESTSELLERS. Uno que lee poco, a decir verdad, menos de seis libros al año, y lo hace por recomendación de algún amigo o, en la mayoría de los casos, simplemente porque se trata de libros superventas a la moda o del ganador del Premio Planeta de ese año. Justamente, es el tipo de lector que mantiene vivo el mercado editorial y hace posible fenómenos como la Saga Crepúsculo de Stephenie Meyer, El Código Da Vinci, de Dan Brown, Cincuenta Sombras de Grey, de E.L. James, entre otros.
EL LECTOR INSEGURO. Suele mostrarse alegre, positivo, movitador, pero en realidad se siente vacío interiormente por lo que siempre está leyendo libros de superación personal o de autoayuda, tales como;“El monje que vendió su Ferrari” de Robin Sharma,“El caballero de la armadura oxidada” de Robert Fisher, “El Alquimista” de Paulo Coelho.
EL LECTOR COMPULSIVO. Es aquel que, junto al
ocasional, mantiene la industria editorial viva. Generalmente, engancha una
lectura con otra y no puede estar sin leer libros, por lo que siempre lleva, al menos, uno consigo y cualquier momento es bueno para sacarlo y leerlo. Puede
que se dedique a un solo género o que sea un lector omnívoro que devora toda
lectura que cae en sus manos, da igual. Se caracteriza no por tener una pila de
libros pendientes, sino estanterías de libros pendientes por leer… Incluso los libros digitales le van bien.
EL LECTOR DE LECTURA POSPUESTA. Cada vez que va a una librería no aguanta la tentación y compra uno o dos libros, tales como Fahrenheit 451 de Ray Bradbury, El Principito de Antoine de Saint-Exupéry, La Metamorfosis de Kafka. Se promete a sí mismo que pronto los leerá. Los coloca en una bonita mesa. De la promesa inicial hasta la acción pueden pasar meses enteros.
EL LECTOR ESNOB.
EL LECTOR LITERARIO O AMANTE LITERARIO. Aborrece cualquier consideración comercial y busca la mayor
experiencia literaria en cada lectura. Gracias a él, siguen existiendo las
pequeñas editoriales especializadas que hacen rentable tiradas de mil
ejemplares o de poemarios en lengua extranjera,
ya que el dinero no es un problema para este tipo de lectores, siempre dispuestos
a pagar por una experiencia literaria y artística.
EL LECTOR BIBLIÓFILO. Si consigue un
ejemplar autografiado o una primera edición, se emociona aunque eso no le
limitará, ya que también le encantan los libros viejos, por su olor, su color
amarillento y sus hojas arrugadas, así como le fascina el olor de los libros
nuevos. Puede comprar libros de segunda mano y si consigue una primera edición,
mejor.
EL LECTOR NOCTURNO. Apila libros junto a la cama porque prefiere la lectura tranquila
de la noche, envuelto en la oscuridad y con, apenas, una luz reflejada en las páginas.
Al contrario que aquellos más diurnos, que prefieren la luz natural y se
agolpan en parques libro en mano.
EL LECTOR EXIGENTE. Es un lector con un bagaje de lecturas amplio y variado. Ha leído
todo tipo de géneros y clásicos de la literatura universal. Tiene nociones
básicas y experiencia en identificar técnicas narrativas y creativas. No se conforma con entretenerse, busca en la lectura
enriquecer sus puntos de vista sobre ideas y pensamientos. Busca que la lectura
le aporte algo más que ocupar su tiempo libre: quiere pensar, reflexionar y
debatirse intelectualmente con la historia que tiene entre manos. Se atreve con todo, incluidos los escritores
noveles y los que se autopublican. Y por atreverse, se atreve incluso con
títulos como La Trilogía de El Señor de los Anillos o la
Saga completa de Juego de Tronos.
EL LECTOR DESTRUCTOR. Este lector es un
verdadero peligro. Para empezar, su casa parece un mercadillo de libros usados
en completo desorden. Le quita las cubiertas, dobla las páginas y escribe en
ellas. Realmente, adora leer pero no sabe conservar un libro.Total, son para
leerlos.
EL LECTOR GRATUITO. Se dedica a recopilar lecturas gratuitas, bien sean legales o ilegales.
Aunque parezca que es un espécimen propio de la era digital, ya existía en los
tiempos analógicos y se nutría de bibliotecas públicas y préstamos de amigos
incautos. Hoy en día, entre la gran oferta de lectura gratuita existente
en las tiendas online importantes y las páginas de descargas
ilegales, ya no necesita nada más.
EL LECTOR INSACIABLE. Lee lo que sea, donde
sea. Para él la lectura es un hábito, una necesidad, es entrar en otro momento,
en otro espacio, en otro mundo que le aleje un poco del estrés diario. No
importa si es un best-seller o un clásico literario, solo busca satisfacer su
hábito de lectura: Tom Clancy,
Stephen King, Danielle Steel, James Ellroy, Anna Rice, Mary Higgins
Clark, Patricia Highsmith, Henning Mankell. Suele ser una persona muy activa,
trabajadora y muy ocupada, por ello leer es su momento de tranquilidad personal
y elije casi siempre lecturas sencillas, de esas que si te distraes un par de
páginas no es grave pero eso sí, que sean coherentes, que la trama le envuelva
lo suficiente como para no querer abandonar ese mundo al menos por las
siguientes dos horas.
EL LECTOR INTELECTUAL
O ERUDITO. Su nivel de lectura es
superior y no se conforma con poco, selecciona los títulos y los autores, leer le
apasiona: Jorge Luis Borges,
Umberto Eco, Italo Calvino, Milan Kundera, sin olvidar los
clásicos: Shakespeare,
Dostoievski, Tolstoi, Balzac,
Dumas, Dickens, o la literatura griega en general y aunque se le vaya la vida en ello, terminará la obra más
difícil de la historia de la literatura: En busca del tiempo perdido de Marcel
Proust. Su nivel máximo de la pasión por el conocimiento es la filosofía, la
historia, la política, las artes… en fin, el pensamiento que nos forjó como
humanidad. Este nivel de lectura está vinculado con personas que estudian
o estudiaron humanidades (historia, filosofía, antropología, filología, etc.).
Presenta una capacidad superior sobre las letras, por encima de todo lo demás, escribe bien, se expresa bien, sabe mantener un debate, discernir, lo
dicho: un erudito.
EL LECTOR
MONÓGAMO. Se
mantiene fiel al libro que está leyendo hasta que lo termina. Se sumerge profundamente
en su universo, se enamora o aborrece concienzudamente a sus personajes, hace
una puesta en escenas de los escenarios en que transcurre la acción
y, alguna que otra vez, cierra los ojos para visualizar determinado pasaje o
paladear alguna frase que le tocó la fibra de una manera especial. Y si algún otro libro
le hace guiños, algo que sucede con frecuencia, no se deja seducir.
EL LECTOR
MEDITABUNDO. Busca aprender algo nuevo con cada
libro y no se conforma con la mera evasión. Aunque principalmente lee no
ficción, también se adentra en la ficción cuando puede aprender de la lectura,
como puede ser con una novela histórica. Para él, leer no es sólo un placer, es
la forma predilecta de aumentar la necesidad de sus conocimientos sobre
las materias más diversas y no siempre con fines académicos.
EL LECTOR
PACIENTE. Lento
como una tortuga pero perseverante hasta el final. Todo lo que empieza a leer lo
termina, hasta los libros que le prestan. Y también los devuelve. No puede
soportar la culpabilidad por no terminar de leer un libro.
EL LECTOR
PROMISCUO. Inicia varias lecturas al mismo tiempo y salta de las
páginas de un libro a las de otro sin el menor incoveniente o remordimiento. Mientras más disímiles sean en época, estilo y género literario, mejor. Va
de Ray Bradbury a Émile Zola, de Charles Dickens a Arturo Pérez Reverte y de
Karel Capek a León Tolstoi sin el menor conflicto, sin sentimientos de culpa ni
sobresaltos.
EL AUDILECTOR. Lee sin leer.Gracias a la tecnología, escucha su libro preferido.
EL RELECTOR.
Es aquel que, además de leer,
relee. Creo que todos los lectores en algún momento releen, a menudo unos más que
otros, pero tod@s hemos repetido lecturas alguna vez, y quizás se deba al factor nostálgico
que nos impulsa a releer libros, porque a veces
resulta reconfortante regresar a un mundo ficticio donde nos hemos sentido a
gusto, junto a personajes inventados en la mente de un escritor que han logrado
cobrar vida propia. Así que, como decía François Mauriac: « Dime lo
que lees y te diré quién eres, es
cierto, pero te conoceré mejor si me dices lo que relees».
Espero que esta serie de clasificación os ayude a discernir qué tipo de lectores sois. Normalmente, una persona pasará por varios de estos tipos, incluso alternándolos según sus lecturas. En mi caso, soy una lectora insaciable, bibliófila, intelectual y un poco compulsiva. Leer es una actividad esencial para mí, como respirar y dormir. Eso sí, todo depende de lo que esté leyendo en un momento dado y de mi estado de ánimo.
¿Y vosotr@s? ¿Qué tipo de lectores/as sois?
Hola!!
ResponderEliminarYo totalmente soy un lector compulsivo y monógamo jajaja, gracias por esta maravillosa entrada.
Saludos!!!
Hola!
EliminarDe nada. Me alegra que te haya gustado.
Salu2
coincido con más de lo que pensaba, soy una lectora nocturna, exigente monógama y releectora xD
ResponderEliminarbye~~
Hola Iku!
EliminarGracias por pasarte.
Nos leemos.
¡Hola! Sí que hay muchos tipos de lectores. Creo que yo sería del tipo de nocturnos, monógamo, insaciable y amante literario jaja, sí que son muchos. Besos 💛
ResponderEliminarHola Vale!
EliminarPues sí son muchos. Nos leemos. Besos
Estoy totalmente de acuerdo contigo. La verdad es que los libros dicen mucho sobre nosotros, aunque a veces no es tan sencillo. Creo que yo sería una mezcla
ResponderEliminarSin duda, me consideraría una lectora compulsiva, eso no lo puedo negar xD, aunque también me podría considerar una lectora insaciable y monógama. Como dices, también depende mucho de nuestro estado de ánimo :3
¡Nos leemos!
Hola!
EliminarLa verdad es que sí, todo depende del estado de ánimo y, a veces, de un momento determinado.
Nos leemos.
Such a beautiful post! I am a daily reader. I try to seperate 3-4 hours read time a day. When reading i feel myself very indepwedent. Have a wonderful day
ResponderEliminarHi!
EliminarThank you very much. I'm glad you liked it and you enjoy reading so much. Have a nice weekend.
This was a cool post. I think sometimes, we can be all these readers through our life. We evolve. Sometimes, we will read too much of let's say Patterson ..and suddenly we will feel..well, I'm done with this guy. Perhaps I am on the more literary side of things and yet not. I go through different phases. And I do love the obsecure (which evidently I cannot spell..please forgive me) Saying all this, I'd rather be writing than reading. Although, I know I have a lot to learn on that subject. Yet, I feel the need to do it even if I am writing for a very small audience and probably just entertaining myself. And yet, I feel these characters come to me and so I feel I must write about them..so who knows..I might be just mental after all. Thank you so much for your comment and coming to my blog. All the best to lots of happy writing!
ResponderEliminarHi Ellie,
EliminarI understand what you mean... and you're right. It depends on each moment of our life, our emotions and our mood. Thanks for visiting my blog and I hope to read you very soon.
¡Hola!
ResponderEliminarMe encantó esta entrada jajajaja, y es que me he podido identificar con muchísimos, unos de ellos han sido el de compulsivo, el de lectura pospuesta, el bibliófilo, un poco del exigente, y bueno entre otros 😂
¡Un beso!
Hola guapa!
EliminarMe alegra muchísmo, ¿qué digo?, me emociona que te haya gustado la entrada. Yo también me identifico con varios jajaja.
Feliz fin de semana.
Besazos
Hola Maria!!
ResponderEliminarTengo un poco de todos, estuvo muy divertido. Gracias por el post.
Besos💋💋💋
De nada guapa😉😘
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